Mercado prometedor

Pero, pasado el primer impacto, el sector mantuvo su ritmo de ventas. Es así como el Estudio Sobratema del Mercado Brasileño de Equipos para Construcción proyecta un crecimiento del 14%, con 30.800 unidades comercializadas en este año contra 26.900 unidades en el año anterior. Para el segmento de línea amarilla, la estimación es de un aumento del 22% ante 2019, alcanzando las 19.600 unidades vendidas.

Este resultado positivo es consecuencia, principalmente, de la continuidad de las obras incluso en medio de la pandemia, y de la oferta de crédito y otras modalidades financieras del sistema financiero, sean los bancos de los propios fabricantes, comerciales, de inversión o de fomento. Además, las ventas de estos equipos siguen diseminadas para más allá de la construcción, como en el sector de alquiler, el agro, la minería y la industria. En este año, específicamente, el Estudio de Mercado de Sobratema muestra el crecimiento de la comercialización para arriendo, que ha quedado con un 27% del total, mientras el agro tuvo un 24% y la construcción otro 24%.

Seguro que el crecimiento por tercer año consecutivo refuerza la recuperación sectorial. Pero es importante afirmar que, en este período, la falta de equipos y los plazos largos para entrega de unidades trajeron consigo impactos a los usuarios. Esto porque los compradores tienen ventanas de oportunidad de negocio, y para atender sus plazos hace falta que el equipo esté disponible. Esta fue una realidad percibida por todos.

Viendo 2021

Para el próximo año, sin duda, el nivel productivo debe normalizarse y la entrega de máquinas debe regularizarse. De manera que todo el sector tendrá la oportunidad de contar con los tres factores indispensables para el usuario que son: la disponibilidad de créditos, la disponibilidad de equipos, y una cartera de proyectos tanto privados como públicos.

En este escenario, el Estudio de Mercado para 2021 estima un aumento del orden del 25% en la comercialización de máquinas para construcción. Para la línea amarilla, el aumento deberá ser del 20%. La perspectiva de un cuarto crecimiento anual consecutivo en las ventas del sector está en línea con las expectativas de constructoras y empresas de arriendo que ven el próximo año con optimismo, tanto por la economía brasileña como para el sector de construcción y la expansión de las empresas.

Mantener este ritmo de crecimiento pasará, de seguro, por atender nuevas demandas cada vez más establecidas, como el soporte personalizado al producto, la demanda por condiciones especiales de financiamiento y, sobre todo, la sustentabilidad ambiental de los productos.

En tanto, nuestra industria está preparada para atender las obras y demandas en 2021. Es un mercado importante para la generación de empleos, de renta y beneficios sociales, contribuyendo para el desarrollo del país y de las personas.

* Eurimilson Daniel es vicepresidente de Sobratema – Asociación Brasileña de Tecnología para Construcción y Minería.